Recorte de prensa del artículo "Cinco Actores, Veintiún Personajes", escrito por Hans Ehrmann, publicado el 22 de agosto de 1995 en La Nación, página 35. La adaptación teatral de "Crimen y Castigo" presenta un recurso arriesgado al emplear solo cinco actores para veintiún personajes, lo que resulta en la creación de algunos personajes esquemáticos; sin embargo, la interpretación del elenco responde al desafío cuando la obra exige mayor profundidad. La obra se enfoca en los tormentos interiores del protagonista y en la relación entre el crimen y la redención, aunque la integración de los elementos sociales y religiosos podría ser más fluida. A pesar de la calidad del montaje, se sugiere la lectura de la novela original para una experiencia más completa.