La publicación gremial Fortín Mapocho fue fundada en 1947 siendo el órgano oficial de los comerciantes y deportistas de la Vega Central. Su vida como medio de oposición comenzó cuando fue adquirido en febrero de 1984 por Jorge Lavanderos, político democratacristiano, dando cabida a todas las corrientes de opositoras al a la dictadura. El gobierno intentó impedir su circulación asegurando que se trataba de una nueva publicación y por lo tanto debía ser aprobada por la autoridad militar.
El discurso de la nueva línea editorial apeló a las organizaciones sociales en general. Su objetivo era mostrar los éxitos de la oposición y la movilización unitaria de todos sus componentes, al realzar sus logros los editores intentaron demostrar que las publicaciones informativas podían influir en el acontecer político. De tiraje quincenal en un comienzo, su primer director fue Felipe Pozo.
En marzo de 1984 Jorge Lavanderos, entonces editor de la publicación fue atacado mientras se preparaba para dar a conocer a la opinión pública las transacciones de bienes raíces de Augusto Pinochet, siendo arrastrado fuera de su automóvil, apaleado y abandonado, los documentos que informaban acerca del escándalo fueron robados del vehículo.
Hasta el triunfo del NO cada uno de los reportajes publicados tuvo como objetivo deslegitimizar la dictadura, desde reportajes y fotografías hasta la caricatura de La Margarita, creación de Gustavo Donoso, que fueron censuradas.
Luego de las clausuras vividas a mediados de la década el Fortín Mapocho comienza a circular diariamente con el fin de contrarrestar los medios oficiales de información durante la concreción de los plazos establecidos por la Constitución de 1980 para el retorno a la democracia. Una vez conseguido este objetivo los graves problemas de financiamiento llevaron al Consejo de Administración a resolver su cierre en julio de 1991.