Recorte de prensa del artículo "Tarzán sin selva", escrito por Hans Ehrmann, publicado el 12 de noviembre de 1994 en La Nación, página 35. La obra es analizada como una reinterpretación de héroes clásicos, donde se observa una pérdida de inocencia y una parodia de figuras antaño poderosas. Se destaca el juego de paralelismos con "Macbeth" de Shakespeare, aunque se sugiere la necesidad de cortes en el texto original para mejorar la obra. A pesar de un nivel actoral aún en desarrollo, se reconoce el potencial y la imaginativa dirección de Sebastián Vila.
Recorte de prensa del artículo "El Tony Grande", escrito por Hans Ehrmann, publicado el 28 de abril de 1994 en La Nación, página 32. Una crítica de "Las siete vidas del Tony Caluga", dirigido por Andrés del Bosque, con dirección musical de Andreas Bodenhöfer. La crítica destaca la vitalidad y dinamismo del espectáculo, así como la habilidad para combinar observación e inventiva en la presentación de elementos circenses. Se menciona la trayectoria de Andrés del Bosque en trabajos relacionados con técnicas circenses y se compara la obra con "La negra Ester", resaltando la recuperación de personajes y ambientes tradicionales chilenos. Se señala que algunos elementos de la obra aún están en rodaje, como el texto que a veces pasa a segundo plano, y que puede haber desafíos musicales, pero se valora el desempeño de los actores y los números circenses que interpretan. La crítica concluye que es una obra que gustará a una amplia gama de espectadores e invita a una segunda visita.
Recorte de prensa del artículo "El Salustio Y El Trúbico", escrito por Hans Ehrmann, publicado el 02 de noviembre de 1995 en La Nación, página 44. La crítica destaca la obra "Salustio y el Trúbico" de Alfonso Alcalde, adaptada por Andrés Pérez, resaltando su rica vitalidad, lenguaje popular y la dignidad de sus personajes marginales. Se enfatiza la abundancia de recursos escénicos y elementos desplegados en la puesta en escena, que pueden abrumar al espectador en una primera visualización. Finalmente, se subraya la creatividad de Andrés Pérez y la conexión genuina del elenco con la obra, lo que resulta en un espectáculo contagioso y conmovedor.