Fue un poeta, ensayista, músico y crítico estadounidense. Fue un artista expatriado y una figura destacada de los principios de la poesía modernista, perteneciente a la generación perdida.
Fue un ideólogo fascista ferviente seguidor de Benito Mussolini y un furibundo antisemita. Durante la Segunda Guerra Mundial, se dedicó a lanzar arengas desde la radio italiana a los soldados estadounidenses para que desertaran y a difundir la propaganda nazi contra los judíos. Fue detenido por el ejército estadounidense y llevado en 1945 a Estados Unidos donde fue juzgado por traición, pero el tribunal consideró que estaba loco (afirmación respaldada por varias figuras literarias, entre ellas Ernest Hemingway, para evitar que fuera condenado a muerte) y ordenó su ingreso en un manicomio, en el que pasó doce años.